martes, 9 de agosto de 2022

El libro antiguo (IV): Signaturas tipográficas, reclamos, foliación




Para entender lo que se trata en esta cuarta entrega sobre el libro antiguo; es necesario comenzar diciendo que la numeración de las páginas que se encuentra en los libros actuales no es un método contemporáneo, es un sistema desarrollado por la imprenta como ayuda a la hora de cortar las hojas y componer los cuadernillos, después de que el pliego completo ha sido impreso mediante la técnica de la “imposición”.



La imposición es el modo de distribuir las páginas de un libro u otra publicación impresa en la hoja de papel de la máquina de impresión.


En la época medieval, como los cuadernos eran las unidades de trabajo independientes hasta el momento de la encuadernación y circulaban entre los copistas y miniaturistas, se solía recurrir a algún procedimiento para establecer un criterio de señalización que facilitase su posterior orden.

Los sistemas utilizados a tal fin fueron la signatura y el reclamo.
Pero antes de hablar de ellos, vuelvo al término de la ordenación del libro, que consiste en doblar y cortar los pliegos para formar los cuadernos, que de acorde al número de pliegos que contengan se denomina de un modo u otro.





Singuilión.
Tiene un pliego, por lo cual tendrá dos hojas, cuatro páginas, ocho columnas cada cuaderno.

Binión.
Tiene dos pliegos, por lo cual tendrá cuatro hojas, ocho páginas, dieciséis columnas cada cuaderno.

Ternión.
Tiene tres pliegos, por lo cual tendrá seis hojas, doce páginas, veinticuatro columnas cada cuaderno.

Cuaternion.
Tiene cuatro pliegos, por lo cual tendrá ocho hojas, dieciséis páginas, treinta y dos columnas cada cuaderno.

Quinternión.
Tiene cinco pliegos, por lo cual tendrá diez hojas, veinte páginas, cuarenta columnas cada cuaderno.








SIGNATURA TIPOGRÁFICA

Básicamente es una marca, señal en un lugar determinado del folio que indica el orden correlativo de los cuadernos que constituyen el cuerpo de un manuscrito utilizando tipos numéricos o alfabéticos o alguna combinación de ambos.


Para entenderlo mejor, es una indicación (letra, número o una combinación) que suele aparecer en la parte inferior derecha de los folios que forman la primera mitad del cuaderno.


Si el cuaderno es un cuaternión, la secuencia aparecerá en los cuatro primeros folios del cuaderno; si es un senión, lo hará en los seis primeros.





(tercer bifolio del cuaderno B)


El uso más antiguo consistía en colocar el signo en el ángulo superior externo de la primera página de cada cuaderno.
En el ámbito bizantino los cuadernos eran señalados habitualmente mediante cifras griegas



También en el ámbito griego el inicio del cuaderno viene a menudo marcado por la presencia de crucecitas, a veces esvásticas u otros signos como puntos o asteriscos, que pueden estar coloreadas.


Estos signos pueden resultar de gran ayuda a la hora de identificar la procedencia de un manuscrito dado, ya que son ligeramente diferentes según los centros de producción e incluso según los copistas.


En los primeros códices latinos los escribas latinos utilizaron para este fin los números romanos, habitualmente colocados en el ángulo inferior derecho de la última página de cada cuaderno. Desde fines del siglo V dichos números podían ser reemplazados por las letras del alfabeto.


Desde el siglo VII/VIII la signatura se desplaza hacia el centro del margen inferior; y desde el X no es raro encontrar tal indicación en el medio del margen inferior de la primera página de cada cuaderno, repitiéndose también en el último folio


Una variedad de signatura que alcanzó larga difusión a partir del siglo XIII y que se prolongó en el tiempo del libro impreso es la signatura alfa-numérica, consistente en la combinación de una letra para numerar los cuadernos, y una cifra que indica el orden del bifolio en cada cuaderno, y que normalmente se encuentra en el margen inferior del recto de la primera hoja de cada bifolio (y por lo tanto solo en la primera mitad del cuaderno)




Este tipo de signatura se denomina signatura de bifolios o numeración [de bifolios] relativa [al cuaderno].

El primer impresor que utilizo este tipo de codicología fue Johann Koelhof, de Lubeck e impresor en Colonia en 1472






RECLAMO


Es la palabra o sílaba que figura en los libros a pie de página, en su margen derecho, la misma que aparece primera en la página siguiente.




Servía para establecer el orden de los cuadernos u hojas que se habían copiado o de las galeradas.En los códices, el reclamo tiene la función de evitar los errores al encuadernar los cuadros o pliegos


En el siglo XIII el uso del reclamo se generaliza por toda Europa.
Utilizado por primera vez por el impresor veneciano Vindelinus de Spira en el último tercio del siglo XV (quizá en 1473). Dejó de utilizarse en el siglo XVIII al generalizarse el sistema de paginación.
En la actualidad el reclamo es la nota del corrector para recordar donde interrumpió su trabajo.
Estos reclamos, siempre que aparecen, lo hacen en el vuelto del último folio de cada cuadernillo (a veces puede haberlos al final de todos y cada uno de los folios), sin embargo su ubicación dentro del folio puede variar. Por lo general se sitúa en margen inferior. En ocasiones pueden tener decoraciones muy elaboradas.



FOLIACIÓN




Su invención es contemporánea a la del reclamo (siglos X-XI), pero su difusión no se inicia hasta el siglo XIII, contribuyendo a ello sin duda el libro universitario.

Las cifras pueden ser romanas o arábigas, estas últimas a partir del siglo XIII.

En la mayoría de las ocasiones el folio se numeraba en el recto, aunque también hay casos más antiguos en los que aparece en el verso. También puede suceder que se repita el número en el recto y en el verso, o bien en el verso y en el recto sucesivo.
¡Hay tantas variantes como tipos!😍



COMO CONCLUSIÓN GRÁFICA DE LO TRATADO EN ESTE POST







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